Indemnización por accidente de tránsito

La Ley del Contrato de Seguro regula la defensa jurídica y el derecho a la libre elección de abogado y procurador.

Muchas veces tus intereses y derechos son manipulados por las compañías de seguros.

Elegir un abogado independiente ajeno a la aseguradora es una garantía para lograr una indemnización más elevada por una accidente de tráfico. Ya que el abogado designado encargado de representar sus intereses no estará sujeto a las instrucciones de la compañía aseguradora.

En muchas ocasiones, las víctimas de accidentes de tráfico se convierten también en damnificados de sus propias compañías de seguros. Porque éstas intentan mediar y solucionar la cuestión con tramitadores propios que, como es lógico, miran por los intereses de sus respectivas empresas. No olvidemos tampoco los denominados “pactos de no agresión” entre aseguradoras. Como consecuencia de todos estos factores y si prescindimos de abogados especializados externos, podemos toparnos con ofertas de resarcimiento que no llegan al 50 por ciento de la indemnización que realmente debería aplicarse.

También ocurre que responsabilidad del accidente es rehusada por ambas compañías y no aceptan dicha responsabilidad. Lo que procede en tal caso es interponer una demanda contra la compañía que sea responsable.

La libre elección de abogado en caso de siniestro es un derecho recogido en las garantías de defensa jurídica de las pólizas de seguros.

La Ley 50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro, establece en su precepto 76 a):

“Por el seguro de defensa jurídica, el asegurador se obliga, dentro de los límites establecidos en la Ley y en el contrato, a hacerse cargo de los gastos en que pueda incurrir el asegurado como consecuencia de su intervención en un procedimiento administrativo, judicial o arbitral, y a prestarle los servicios de asistencia jurídica judicial y extrajudicial derivados de la cobertura del seguro”.

Por su parte, el artículo 76 d) dice:

“El asegurado tendrá derecho a elegir libremente el Procurador y Abogado que hayan de representarle y defenderle en cualquier clase de procedimiento. El asegurado tendrá, asimismo, derecho a la libre elección de Abogado y Procurador en los casos en que se presente conflicto de intereses entre las partes del contrato. El Abogado y Procurador designados por el asegurado no estarán sujetos, en ningún caso, a las instrucciones del asegurador”.

En pocas palabras, si has contratado una póliza de defensa jurídica tienes derecho a que tus intereses sean defendidos por los abogados de plantilla de tu compañía de seguros o por el que tú mismo designes, según tu voluntad y criterio. La legislación española, como acabas de comprobar, configura este derecho como básico del asegurado. Y es que resulta de puro sentido común encomendar tu defensa jurídica a un profesional independiente y ajeno a la propia compañía de seguros.

Casi todas las pólizas de automóviles incluyen defensa jurídica con cobertura de “reclamación de daños”. Ésta te permite seleccionar libremente un abogado de confianza, para que defienda tus intereses y derechos. Ahora bien, la cuantía de la cobertura varía en función de la aseguradora y del tipo de póliza (oscilan entre los 200 y los 6000 euros). Además, existen interesantes matizaciones y excepciones, que conviene tener bien presentes.

He aquí algunos ejemplos:

• Si eres el responsable del accidente, tu aseguradora asume tu defensa y debes aceptar el abogado que aquélla te asigne. Excepto si la otra parte también es un asegurado de tu compañía.
• Algunas empresas limitan la libre designación de abogado al conductor y al tomador de la póliza.
• Si eres pasajero de un vehículo con conductor culpable, la defensa jurídica del automóvil causante del accidente no te ampara para reclamar contra el primero.

Especialización

Procura contactar con un profesional especializado en accidentes de tráfico. Si deseas excelencia, buen servicio y garantías, debes encontrar al experto del derecho que domine el ámbito en el que se hallan tus necesidades. El mundo jurídico es muy vasto y resulta complicado dominar al cien por cien todas las áreas. Cuando necesitamos ayuda legal o asesoramiento jurídico hemos de ser prácticos, acotar nuestra búsqueda y optar por abogados especialistas en el ámbito que nos atañe (los accidentes de tráfico en este caso).

Experiencia

Opta siempre por servicios legales de un despacho con una amplia experiencia en el ámbito de los accidentes de tráfico.

Nosotros tenemos más de 15 años de experiencia en el sector de los accidente de circulación.

Referencias

Las referencias de conocidos, amigos o familiares son un magnífico termómetro para conocer las cualidades de determinado abogado.

El 80 % de nuestro trabajo proviene de antiguos clientes o recomendado por ellos.

Desafortunadamente los accidentes de tráfico están a la orden del día. Y es fácil dar con personas de nuestro entorno que han tenido que recurrir a cierto despacho, para solicitar la oportuna indemnización por daños.

Honorarios

Los honorarios son otro elemento a tener en cuenta en la elección del profesional del derecho que se va a encargar de tu indemnización por daños. Sé cauto en esta cuestión. En principio, desconfía de los presupuestos extraordinariamente bajos. Los servicios jurídicos se caracterizan por ser altamente especializados.

El ámbito geográfico de actuación o la primera impresión son otras cuestiones que pueden ayudarte en la elección. En cualquier caso, no te cortes antes de llegar al acuerdo. Y pregunta al profesional del derecho por su experiencia previa en indemnizaciones por accidentes de tráfico, forma de pago, facturación. Así como por el período aproximado para resolver el asunto etc.

Todo depende de las circunstancias que rodean al caso, el tipo de lesión que sufre el accidentado, la compañía aseguradora contraria, el médico forense que corresponde al juzgado donde recae la denuncia, así como las circunstancias en las que ocurrió el accidente. Por todo ello, es indispensable contar con un abogado experto en reclamar indemnización en caso de accidente de tráfico que pueda determinar en cada caso concreto, cual va a ser la mejor opción. En el caso de lesiones leves, como latigazos cervicales muchas veces resulta más productiva la negociación amistosa ya que la sensibilidad de los médicos forenses en los juzgados ha disminuido con este tipo de accidentados.

La opinión general de los forenses suele ir dirigida a recortar los días de las lesiones (esto es a computar menos días de los que realmente se ha estado bajo tratamiento médico y rehabilitador) y a no considerar secuelas resultantes (bajo el pretexto de que las secuelas que dejan estas lesiones son temporales y por lo tanto técnicamente deben desaparecer en un tiempo más o menos breve). El resto de lesiones más graves deben ser en cualquier caso tratadas caso por caso y supervisadas por abogados accidente de tráfico en Barcelona, expertos, conocedores de la compañía contraria, del juzgado competente y de las alternativas que se pueden ofrecer al lesionado en cada caso en función de distintos parámetros como puede ser la culpa en el accidente, etc…

Litigios por accidentes en transporte público como ocupante o viajero e Indemnizaciones por atropello. En Garanley te brindaremos un servicio completo, asesoramiento jurídico, defensa y representación técnica, y todas las gestiones que necesites para salvaguardar tu derecho a indemnización por daños y perjuicios.