Dado que por cuestiones de empleo u otras circunstancias la edad de emancipación es más alta en España que en otros países del entorno europeo, lo que plantea nuevos interrogantes a quienes viven con sus padres, es normal preguntarse qué pasaría a quienes viviesen en una casa heredada y tienen hermanos.
¿Es posible que pueda echar un hermano a otro de una casa heredada en la que vive? ¿Se realiza un reparto equitativo de la vivienda? ¿Qué ocurre en caso de desacuerdo?
Resumen del artículo
Qué puede ocurrir ante el fallecimiento de los progenitores
Se puede dar el caso de que una persona adulta esté viviendo por determinadas circunstancias en casa de sus padres y que estos fallezcan. En ese supuesto, si es hijo único, él es el legítimo heredero de la vivienda. Sin embargo, en caso de tener hermanos, estos tendrán derecho a reclamar una parte de la misma, lo que dejaría en una situación comprometida a quien estuviese viviendo en casa con sus padres.
¿Qué soluciones hay ante este panorama? ¿Se puede heredar una casa entre varios hermanos? ¿Se puede ceder a uno de ellos si existe buena voluntad? Vayamos por partes.
Para empezar, hay que entender que una vivienda es un bien indivisible. Es decir, puede haber varios hermanos que consten como copropietarios, pero de una parte abstracta, no se puede distribuir por habitaciones entre los propietarios. La ley establece, en estos supuestos, que uno de los copropietarios, el que más necesitado esté de la vivienda, haga un uso común de la misma, sin que ello suponga un perjuicio para los demás.
En caso de quedarte en la casa que tus padres te dejaron en herencia, tendrás tres opciones ante ti.
La primera, abrazar el régimen precario. En este caso, podrás permanecer en la vivienda, sin tener que pagar nada a cambio y sin un tiempo límite establecido. Ahora bien, tus hermanos podrán llevar a cabo acciones legales contra ti.
Podrás también quedarte en régimen de comodato. Se trata de una cesión gratuita a tu favor para que te quedes en la casa, pero aquí se fija una duración determinada.
Por último, podrás optar por el arrendamiento, la situación más favorable desde el punto de vista legal, ya que satisface a todas las partes: tú pagas por vivir en casa de tus padres, y a cambio tus hermanos recibirán dinero por el uso y disfrute de la vivienda al ser ellos copropietarios. Todo esto, por supuesto, previo acuerdo.
En los dos últimos supuestos es necesario contar con el beneplácito de los hermanos. En realidad, el no contar con él te expone a un proceso judicial contra ti por vulnerar su derecho: al ser propietarios de la vivienda, no puedes atentar contra su derecho a su uso y disfrute sin previo aviso ni mediante acuerdo verbal o escrito.
“¿Y si ninguna de las opciones me satisface? ¿Podría comprar la casa heredada a mis hermanos?” Eso es lo que se preguntan muchos, y lo cierto es que es una solución aceptable: pagar por las partes que tienen tus hermanos de la vivienda para comprarla, excepto por la tuya, que ya es de tu propiedad. Si sois seis hermanos, tendrías que pagar cinco sextas partes para adquirir la vivienda.
¿Puedo reformar la vivienda de manera unilateral? ¿Me pueden echar?
En el caso de las viviendas heredadas hay que tener cuidado con las decisiones unilaterales. Hacer algo sin el consentimiento del resto de copropietarios te puede poner en una situación muy incómoda.
La ley deja muy claro que no está permitido que, en el caso de las viviendas con varios copropietarios, uno de ellos ejecute reformas o cualquier tipo de obra que altere la vivienda sin el consentimiento expreso. Cualquier obra realizada sin autorización puede ser denunciada y el ejecutor puede estar obligado a revertir todos los cambios aplicados.
“Ahora mismo vivo en una casa heredada. ¿Me pueden echar mis hermanos?” Es otra de las dudas que asalta a aquellos que están viviendo en la casa heredada de sus padres sin previo acuerdo. Si este es tu caso, todo depende de cuál sea tu situación con tus hermanos, que serán los copropietarios de la vivienda, pero en todo caso, sí: tus hermanos pueden tomar acciones legales contra ti que, muy seguramente, desembocarán en un desahucio por precario.
Esto sucede cuanto se está viviendo en una casa heredada sin el consentimiento de los hermanos y sin pagar nada a cambio. Es una situación que normalmente se da cuando uno de los hermanos quiere que la vivienda genere un rendimiento mediante su venta o puesta en alquiler. Para conseguirlo, la casa no puede estar habitada, lo que implica tener que echar al hermano que está ocupándola.
En esos casos, aunque la ley esté de su parte, te recomendamos que intentes llegar a un acuerdo con tus hermanos y que trates de costear tú, en la medida de tus posibilidades, el arrendamiento de la vivienda. Al pagar tú el alquiler, satisfarás tanto las necesidades de tus hermanos como las tuyas, lo que hace que sea una solución óptima para todas las partes.
Por eso, antes comentábamos que la mejor solución ante estos conflictos era negociar el arrendamiento de la vivienda al hermano que quiere vivir en la casa. Esta acción no suele conllevar repercusiones legales, y tener como arrendadores a los hermanos puede otorgar un plus de flexibilidad del que se carece en otros supuestos, por lo que también es beneficioso para ti si quieres vivir en la casa que habéis heredado de vuestros padres.
En todo caso, ante una situación de este tipo, lo más aconsejable siempre es que busques asesoramiento especializado. Un equipo de abogados expertos en herencias y derecho de sucesiones puede serte de gran utilidad para encontrar el respaldo y el asesoramiento que necesitas, por lo que no dudes en ponerte en contacto con nosotros para exponernos tu caso y tratarlo contigo a la mayor brevedad.