A la hora de hacer frente a la herencia de un familiar tras su deceso, son muchas las dudas que pueden surgir si, como en el caso de muchas familias, hay varios integrantes que tienen derecho a optar a ella o han sido designados como herederos por el causante.
En algunos casos, bien por causas económicas o por otros motivos personales que sopesa cada heredero, es posible que uno de ellos renuncie a su parte de la herencia. ¿Se puede hacer eso? ¿Renunciar a una herencia en favor de otro heredero es legal? Te contamos todos los detalles acerca de esta posibilidad.
Resumen del artículo
Si renuncio a una herencia en favor de otro heredero, ¿se considera donación?
Toda persona tiene derecho de aceptar o repudiar la herencia en caso de que así lo desee. Cada caso es un mundo y es una decisión que principalmente está motivada por circunstancias personales y económicas.
Los herederos que no quieran recibir su parte de la herencia y quieran rehusar a ella pueden hacerlo favoreciendo al resto de herederos. Cuando eso ocurre, la herencia se acrecienta para el resto de herederos y se reparte entre ellos.
La renuncia de la herencia repercute de manera directa en el resto de los herederos, ya que esta renuncia tiene una serie de consecuencias jurídicas y fiscales, ya que la renuncia a favor de otra persona es un caso de aceptación tácita de la herencia. Eso significa que, sin darnos cuenta, podríamos estar aceptando una herencia sin saberlo, lo que puede ser un problema si, por ejemplo, trae asociadas una serie de deudas.
En caso de que se produzca una renuncia de la herencia a favor de otro heredero, se considerará, a todos los efectos, que la persona que ha repudiado su parte de la herencia ha llevado a cabo una donación de esos bienes al beneficiario, y eso acarrea una serie de pagos en concepto de impuestos por la donación de esos bienes.
Esto ocurre mucho entre hermanos, entre los cuales puede haber desavenencias sobre la herencia. Quizá uno de ellos no quiere aceptar la herencia y renuncie a su parte a favor de otro de sus hermanos.
A efectos legales, se considera que el hermano que ha renunciado ha aceptado en primera instancia a heredar esos bienes, y después los ha donado a otro de sus hermanos. Por tanto, en ese caso habría que pagar no solo el impuesto de sucesiones, sino también el impuesto de donaciones, ya que se ha producido una donación a todos los efectos.
¿Qué ocurre si se renuncia a una herencia, pero se decide no hacerlo a favor de nadie?
Lo lógico es pensar que si se va a renunciar a la herencia se va a hacer en beneficio de uno de los herederos o del resto. Sin embargo, es posible encontrarnos con casos en los que no se llega a producir una renuncia de la herencia en favor de otro heredero, sino que se repudia la herencia correspondiente sin designar a ningún beneficiario.
Es decir, legalmente en estos casos se interpreta como que el heredero ha aceptado en primera instancia la herencia, pero acto seguido la ha repudiado, creándose una situación algo compleja.
Si esto ocurre, pueden pasar, a grandes rasgos, tres cosas:
- Se traspasa la herencia a un heredero sustituto. Esto ocurre si, por ejemplo, existe un testamento que deja los bienes a un hijo, pero este fallece o renuncia a la herencia. Entonces, la herencia pasa a los nietos, que ejercerán de herederos sustitutos.
- Se adhiere irreversiblemente al resto de la herencia conjunta. Aunque el heredero que renuncia a su parte de la herencia designe lo contrario, si no la acepta pasará al resto de herederos. Es lo que se conoce como el derecho de acrecer, que sucede cuando un heredero renuncia a su herencia. Esta es añadida a la parte que reciben el resto de designados de forma equitativa.
- Se produce un procedimiento de renuncia intestada. En caso de que haya solamente un heredero en el testamento y este renuncie a la herencia, se abrirá una sucesión intestada.
En estos casos, es siempre la Ley la que suple la voluntad del causante designando sucesores por defecto ante la ausencia de los mismos a causa de la renuncia. Se tomará como referencia el nivel de consanguinidad con el causante, es decir, primero heredarán los familiares más próximos en el orden que establezca el Código Civil, y en caso de que no hubiese herederos vivos, la titularidad de la herencia pasaría a ser del Estado.
Renunciar a una herencia es posible, pero conviene hacerlo con el respaldo adecuado
Sí, es legal y factible renunciar a una herencia en favor de otro heredero, pero hay varios supuestos que pueden producirse y por eso siempre es conveniente contar con asesoramiento profesional.
En Garanley somos expertos en la gestión de casos de herencias en los que se dan situaciones similares con renuncias de por medio o litigios que se alargan en el tiempo a cuenta de un testamento o una herencia que genera dudas o suspicacias entre los herederos.
Desde aquí, nuestra recomendación es que siempre optes por contar con un equipo profesional como el nuestro para gestionar siempre la herencia y dispongas siempre de todo el apoyo jurídico y legal durante el proceso.