Es normal no saber cómo reaccionar tras sufrir un percance con tu auto. En Garanley, como despacho de abogados en Barcelona te indicamos los aspectos legales que se deben considerar ante un accidente de tráfico. De esta manera tendrás idea de cómo proceder si te ves involucrado en este tipo de situaciones.
Resumen del artículo
Aspectos legales que se deben considerar ante un accidente de tráfico
Es importante que sepas que aunque tengas un seguro, tienes derecho a elegir tu propio abogado. Distinto al que ofrece la aseguradora.
Consecuencias inherentes
De estos tipos de infortunio se originan consecuencias de carácter legal en el ámbito civil, administrativo y penal. Cada una de estas tiene su jurisdicción, así como su manera de proceder y autoridades pertinentes. Sin embargo, tienen una interdependencia. Por tanto, lo primero a tratar es el proceso penal por delito de seguridad vial.
El mayor peso de la ley recae en quien se demuestre o declare culpable del acontecimiento. La responsabilidad penal versa en la relación ciudadano-Estado y se basa en el Código Penal. Durante un accidente de este tipo podrías resultar culpable delito culposo por lesiones ocasionadas o incluso un homicidio culposo.
El Estado vela por impedir la impunidad de los autores por incumplir el deber del ciudadano. Es por ello que se castiga con la privación de libertad, multas administrativas, revocación del permiso de conducir o servicio comunitario. La sanción dependerá de la gravedad del asunto.
Responsabilidad civil
Consiste en la responsabilidad del causante del accidente de hacerse cargo de los daños e inconvenientes ocasionados durante el hecho. Además, el fundamento general del accidente reside en la responsabilidad civil, por los agravios a los presentes o la destrucción de propiedad tanto pública como privada.
Esta situación no aplica cuando se demuestra que el percance se produjo por negligencia, descuido o conductas inapropiadas de la víctima en cuestión. Para ello, el señalado como acusado debe presentar las pruebas pertinentes en torno al caso. Existe la posibilidad de que el hecho se haya producido por circunstancias de fuerza mayor como un desastre natural o el mal funcionamiento del vehículo.
Responsabilidad contravencional
Se basa en el deber que tiene cada ciudadano de cumplir el Código de Tránsito. Por lo tanto, la autoridad correspondiente tiene la tarea de determinar las infracciones de las normas de tráfico y verificar quién fue el desobediente. De igual forma, le corresponde imponer las multas pertinentes por la violación de las leyes.
La Dirección General de Tránsito (DGT) solo se encargará de las responsabilidades de la persona que incumplió el Código y a su vez las normas del Estado. No le concierne resolver los inconvenientes entre los involucrados en el hecho. Sin embargo, su dictamen vale para hacer cumplir las leyes de responsabilidad social y penal.
En el momento, el inspector de tránsito puede declarar responsabilidad contravencional a un solo involucrado, a los dos o a ninguno. Esto se determinará por las circunstancias en las que se produjo el accidente y el informe de tránsito realizado por la autoridad.
Inclusión de la aseguradora
En muchos casos, en especial los de gravedad menor, el agraviado evidencia su necesidad de justicia que, disfrazada, conlleva a un interés económico. Por ello, es importante que el causante del accidente conozca los deseos del afectado y además, contar con una póliza de seguro por responsabilidad civil extracontractual por daños a terceros.
El tener este tipo de cobertura, evita en muchas ocasiones que se llegue a un juicio. Principalmente porque las aseguradoras te ayudarán a resolver rápido el conflicto. Si el autor del accidente posee esta póliza, la reclamación puede proceder de inmediato. Sin embargo, se recomienda siempre tener la representación de un abogado.
En caso del agraviante no poseer un seguro o este no ofrecer una suma de dinero que el afectado considere que resarce los perjuicios, puede pedir una cita para conciliar. Se puede solicitar justar la indemnización de los daños al conductor, al dueño del coche o a la aseguradora.
Es importante destacar que nunca se debe realizar una reclamación con petición de dinero a una persona natural, ya que podría incurrir como extorsión o constreñimiento. Por eso se recomienda tener asesoría legal antes de proceder con este tipo de acciones. Ya que los profesionales saben las formas de solicitar la compensación, cuando hacerlo y cuánto es conveniente por los problemas
También se debe tomar en cuenta que las personas que transiten en coches sin los seguros obligatorios recibirán multas por la siguiente categoría:
- Vehículos pesados: € 2.600.
- Turismos: € 1.500.
- Motocicleta: € 1.250.
- Ciclomotor: € 1.000.
Documentación médica
En el momento puede que ninguno de los ocupantes de los coches o los involucrados tenga algún síntoma que amerite revisión médica de emergencia. Pero, es importante realizar un chequeo. En el caso de haber lesionados, estos deben guardar todas las facturas, informes médicos, resultados de exámenes. Entre otra documentación que pudiese necesitarse para exigir indemnización o en caso de ocurrir un litigio.
Un abogado experto en accidentes de tráfico podrá ayudarte a recibir la asistencia médica necesaria. Así como en las pericias necesarias que servirán como pruebas en una potencial demanda.
Eximientes de compromiso
Como en todo ámbito, hay excepciones a las reglas, existen cuatro situaciones que eximen al causante del accidente de las responsabilidades. De igual forma, el inspector de tránsito encargado del proceso contravencional debe realizar su informe. Así como indagar y entrevistar a los testigos para determinar si realmente el hecho ocurrió bajo un exonerante.
- Causa de fuerza mayor. Por ejemplo, si para evitando atropellar a un peatón o un animal se choca con otro vehículo y daña alguna propiedad.
- Caso fortuito. Cuando el accidente se produce por falla mecánica del coche.
- Por un tercero. Ocurre cuando otro agente en la vía produce el hecho fatídico.
- Culpabilidad de la víctima. La culpabilidad exclusiva de la víctima se da cuando, por ejemplo, un conductor atropella a una persona que cruza la calle cuando la luz del semáforo estaba en verde para el coche.
Procedimiento para ciclistas
Las bicicletas también son consideradas un vehículo. Por esta razón deben circular por el canal destinado a ellas. Sin embargo, tienen una diferencia con los transportes de motor: no es obligatorio que tengan una póliza que cubra daños por accidente. Si una persona es atropellada por un ciclista, debe proceder de la siguiente manera para solicitar indemnización.
En primer lugar, la víctima debe recopilar información del conductor, como nombres, apellidos, dirección y un número de contacto. Esta tarea puede tornarse difícil si el causante se fuga de la escena. Posteriormente, el afectado debe conseguir fotografías del emplazamiento. Así como compilar sus datos y el testimonio de las personas presentes durante el accidente.
De igual forma, debe conseguir el informe médico donde se detallen las lesiones físicas y psicológicas sufridas. Así como el atestado policial donde las autoridades asientan lo ocurrido. En caso de daños a objetos, debe incluir la tasación o factura de compra. Una vez tenga todos los documentos, en el paso de un año puede proceder la reclamación amistosa.
Para hacer la petición, el peatón debe enviar una carta exponiendo los motivos para considerar culpable al ciclista. Si este último ignora la solicitud, el accidentado puede demandarlo mediante el Juzgado de Primera Instancia. Cabe destacar que un viandante puede reclamar únicamente si fue la bicicleta que irrumpió su espacio.
En caso de comprobarse que el accidente se produjo por la invasión del carril de bicicletas por parte del caminante, la petición se desestima. En cuanto a los monociclos, monopatines, hoverboards y segways, se debe seguir este mismo procedimiento si ocurre un incidente. Ya que también son vehículos, pese a no tener motor. Si el conductor se fuga, los entes policiales deben localizarlo luego de tomar declaraciones y realizar el informe del hecho.
Adolescentes involucrados
Los accidentes viales son la mayor causa de muerte entre jóvenes de 15-24 años. Además, cuando el incidente es causado por un menor de edad, las demandas tienden a ser agresivas al considerar que tanto padres como adolescentes deben pagar de alguna forma por el hecho. Es conveniente que los chicos estén incluidos en la póliza de seguro del coche.
Por otra parte, en caso de demostrarse la culpabilidad del adolescente en la causa del accidente, los padres serán los responsables financieros. Si el seguro no cubre el monto de indemnización, puede ser llevado a la corte por demanda. Antes de permitir que un joven maneje, es necesario instruirlo de manera adecuada y hacerlo pasar por un programa de preparación para conducir.
Los jóvenes deben ganarse la confianza para conseguir las llaves del coche. Al igual que los adultos, también recaen sobre ellos las responsabilidades jurídicas en caso de ocurrir un percance automovilístico o mientras conducen cualquier tipo de vehículo. Teniendo en cuenta que existen medios de transporte sin motor.
Es importante conocer los aspectos legales que se deben considerar ante un accidente de tráfico, para estar prevenidos ante cualquier eventualidad. Si quieres aprender más o necesitas asesoría en este tema, contáctanos. Somos especialistas en este ámbito jurídico.